La colección de Rachel Roy se ofrece como un canto al optimismo y a la felicidad y potencia todo cuanto existe de femenino y delicado en una joya, al mismo tiempo, las distintas creaciones de la firma ejercen de bellos talismanes, destinados a acompañar y proteger del mal a sus propietarias.
En poco tiempo esta singular marcha ha conseguido seducir a mujeres de todo el mundo, entre las que se encuentran las más afamadas personalidades.
Rachel Roy, de origen indio, creció en la California del norte, rodeada de las imágenes de papel cuché que llenaban las páginas de la revista Vogue y que la hacían soñar con un prometedor futuro como diseñadora de moda.
Y ese futuro se hizo realidad en el año 2004, cuando Rachel, tras estudiar en la Universidad de Washington DC y trabajar como estilista fotográfica para distintas publicaciones, lanzó su propia colección, la Rachel Roy New York Collection.
La firma Rachel Roy ofrece un universo de moda que abarca todo el guardarropa femenino, y que incluye, como no, la joyería. Sus creaciones se inspiran en una mujer exótica, segura de sí misma, que resulta elegante con naturalidad. Desarrolla joyas que pueden ser entendidas como un canto al positivismo, a la delicadeza, a una feminidad eterna y armoniosa.
Entre sus incondicionales, se encuentran celebridades como Sofía Vergara, Camerón Díaz, Emiliy Blunt, e incluso la Primera Dama norteamericana, Michelle Obama.
La colección joyera de Rachel Roy se caracteriza además por su claro carácter de talismán.
De hecho, las diferentes piezas que propone se presentan como estilizados amuletos, diseñados para acompañar a sus propietarias durante las distintas horas del día. Abundan los colgantes, pulseras, pendientes y charms decorados con manos Hansa y con ojos rasgados, dos símbolos empleados para evitar el “mal de ojo”. Son frecuentes las calaveras, que protegen de la suerte adversa y de las vibraciones negativas.
Encontramos también serpientes, símbolo de seducción y poder, y plumas, que para los indios americanos significaban verdad, acción y ascensión espiritual. Y son dignos de mención los pendientes adornados con piedras de corte piramidal, una forma que por tradición está considerada como altamente protectora.